Una de las primeras fotos del grupo, circa 1923

viernes, 29 de junio de 2012

8. La Monumental de Barcelona


El museo taurino de Barcelona, ubicado en la plaza de toros Monumental de Barcelona, donde actualmente ya no se celebran corridas, continúa abierto al público y cuenta con una muy buena y amplia colección de carteles taurinos de La Monumental de todas las épocas. Con la entrada al museo, que cuesta 6 Euros, también se puede visitar la plaza al completo, los tendidos, la arena, los callejones, el patio de caballos, todo.


En la mayoría de estos carteles, expuestos en el museo, en el pié, debajo del nombre de los mejores diestros del momento aparece el nombre de la banda: «Amenizará el espectáculo la banda “La Popular Sansense”», y es que no en vano fue durante casi 60 años la banda titular del coso barcelonés.


Aunque La Popular Sansense no es, ni ha sido nunca, una banda exclusivamente taurina, si es la faceta por la que, seguramente, es más conocida; han sido muchas tardes de toros, ininterrumpidamente durante años y años, con muchas corridas anuales. Las notas generadas por los músicos de La Sansense han acompañado durante muchos años las mejores faenas taurinas vistas en La Monumental de Barcelona. Los nombres “La Popular Sansense” y “La Monumental de Barcelona” aparecen unidos en la historia reciente de la ciudad y del toreo.
El repertorio taurino de la banda es sumamente amplio, ya que cuenta con más de 2000 pasodobles, recogidos y guardados a lo largo de los casi 100 años de historia que cuenta de La Sansense, “pocas bandas de España pueden presumir de una cosa así”, comenta su director Antonio Marín.

Casi 100 años de toros; la plaza de El Sport fue inaugurada en 1914 y reinaugurada en 1916 ya como La Monumental. La construcción es de estilos mudéjar y bizantino y tiene un aforo de 19.582 localidades. El 25 de septiembre del pasado 2011 se realizó en el coso la última corrida.

Estos días también se exponen en Barcelona una cincuentena de carteles creados por Miquel Barceló; aunque la interesante exposición está compuesta principalmente por carteles sobre las propias exposiciones del artista mallorquín, la muestra también contiene algunos carteles taurinos de Barceló, entre los cuales podemos ver 2 de La Monumental, si bien en los carteles taurinos modernos ya no se incluía el nombre de la banda.


Exposición “Els Cartells de Barceló”, en el “Reial Cercle Artístic de Barcelona”, del 14 de junio al 8 de julio de 2012.


miércoles, 6 de junio de 2012

7. ¡Suena Pan y Toros!


El siguiente artículo y las imágenes que contiene me lo ha remitido un amigo, José Cisneros, hijo de Alfonso Cisneros que fue músico de La Popular Sansense en la década de los sesenta.
José Cisneros es un asiduo y apreciado colaborador en la tarea que me ocupa de recoger información e imágenes de la historia de la Banda, y este artículo es una buena aportación a la causa, vayan para él pues mis agradecimientos.

« ¡Hay cerveza, coca-cola, naranjada, limonada, pipas, cacahuet! Con estas palabras al son de una musiquilla pasaba un vendedor anunciando sus productos por la delantera donde estaba dispuesta la Banda de Música Popular Sansense en la Plaza de Toros Monumental de Barcelona; el cual puntualmente cada domingo dejaba amablemente una bolsa de cacahuetes encima de la silla aún sin ocupar que se hallaba en el estrado destinado al Director de la Banda.

Ahora ya con cierta edad, supongo que no hacía la misma pleitesía con el resto de músicos presentes porque de hacerlo, les hubiera sido imposible sacar las notas musicales a sus respectivos instrumentos, algo que por obviedad no podía pasarle al Director.

Mi estancia en Barcelona fue desde septiembre de 1959, año que nací en la localidad de Santa Coloma de Gramanet, cuna del torero más grande que ha dado Cataluña y que en la actualidad es profesor de la Escuela de Tauromaquia de Madrid, Joaquín Bernadó; hasta finales de 1970, año en que mis padres decidieron regresar a su lugar de origen, Bailén en la provincia de Jaén.

Solamente 11 años de los 53 que casi voy a cumplir fueron los suficientes para conseguir que nunca olvide esa maravillosa tierra que taurinamente tanto me enseñara.

Los domingos eran especiales, a mi padre, componente de la Banda de Música Popular Sansense y sereno de barrio en su trabajo habitual por aquellos años, ayudaba todas las mañanas por su barriada a cobrar a los vecinos la cuota voluntaria que cada cual quisiera otorgar, ya que los serenos no obtenían emolumentos del propio Ayuntamiento, los cobros mensuales de los vecinos, las tarjetitas de felicitación navideña del sereno y la lotería de navidad, eran los ingresos que estas personas percibían por su trabajo nocturno, amén de un sustancial efectivo de parte de los dueños de las múltiples empresas habidas en su zona de servicio, donde en las cuales previo a la hora de comienzo de la jornada laboral se encargaba de ir encendiendo luces y maquinaria. Otro de sus trabajos era el de acomodador en el Cine Goya de Santa Coloma de Gramanet, el cual creo recordar también pertenecía a la Empresa Balañá, algunas películas habré visto en este cine que desconozco si perdura en la actualidad, aunque a decir verdad el cine no me decía gran cosa, en cambio los toros………., estaba deseando que llegara el domingo por la tarde, ya que los jueves, días tambien de corrida en la Monumental, era imposible asistir por obligaciones escolares como es lógico.


Los toros dejaron en mí una huella que aún hoy a mi edad sigo con la afición e incluso a lo largo de mi vida he tenido la oportunidad de hacer alguna inclusión en festivales y en la actualidad los tentaderos en las fincas bravas de Jaén son mi vía de escape como aficionado práctico.

Nuestra primera parada al llegar en autobús a Barcelona era en el bar “Sol y Sombra” frente a la Monumental, mi padre un café, yo, un cacaolat y de ahí a la Plaza por una puerta de servicio que estaba creo recordar en la calle Diputación.

Veterano ya con esa edad como asistente a la Plaza de Toros, una vez entrábamos, yo me quedaba por el amplio Patio de Caballos que dispone la Plaza, pues por aquellos años, del patio de caballos a donde se encontraba la Banda de Música solo había que subir unas pocas escaleras, ya que se encontraba justo encima de la Puerta de Cuadrillas. Recuerdo una barra de bar muy grande donde me acercaba a coger algunos terrones de azúcar con los que endulzar la boca de los caballos de picar que deambulaban calentando por los picadores. Del mismo modo aunque vagamente, recuerdo unas vidrieras donde se podían admirar unos trajes de luces y otros enseres taurinos, supongo sería un pequeño Museo Taurino habido en la Plaza. Especial era el día que había rejoneadores, ya que en el espacio de tiempo antes de empezar el festejo podía admirar el enjaezado con el que los mozos de caballos tan hábilmente proporcionaban a los caballos de rejonear para dar más realce y belleza a los mismos.

¡Suena Pan y Toros! retirada. El paseíllo va a comenzar y en dos zancadas subía las escaleras para colocarme en la barandilla que separaba la Banda de Música del resto de tendido y ver las faenas de los toreros que una vez daban la estocada, volvía al patio de caballos para ver llegar al toro en el arrastre y observar la destreza con que los matarifes hacían su trabajo; y así toro tras toro hasta acabar la corrida; aunque antes de salir de la Plaza me asomaba al ruedo entrando por la Puerta de Cuadrillas y ver el cartel que ya habían colocado los operarios con los toreros que harían el paseíllo la semana siguiente.


Este pequeño relato y estas fotos, incluida la de mi 1ª Comunión en la que me acompañó la Banda de Música desde mi casa a la Iglesia, se lo envío a Josep Cortés como aporte al Blog y su admirable labor que está empezando a realizar para reconocimiento de esta gran Banda de Música Taurina como es la Popular Sansense.

En otra ocasión, aunque haya pasado la friolera de 42 años le enviaré las “consecuencias” que me han traído tanto el ser hijo de un componente de esta Banda de Música como la Plaza de Toros de Barcelona, más que nada para demostrar a todo aquel que dice que en Barcelona no hay afición a los Toros que está del todo equivocado. En mí se da la circunstancia que gracias a esta Banda principalmente y en consecuencia a la Monumental de Barcelona y la desparecida Plaza de las Arenas, sin ejercer la bonita profesión de Matador de Toros -eso son palabras mayores- soy, me siento y moriré TORERO. Gracias Barcelona, gracias Monumental, gracias a la Banda de Música Popular Sansense. »
                                                                                         José Cisneros

domingo, 3 de junio de 2012

6. In Memoriam

                                            Juan Cortés. Década de los 50

El pasado noviembre y tras unos pocos meses de cruel enfermedad, cuando contaba solo 70 años, murió mi hermano Juan.
En la década de los 50, Juan Cortés fue músico de La Popular Sansense; mi hermano, de joven, había tocado la trompeta con el grupo, acompañado a la banda en muchas de sus actuaciones.
  
En tantos años de historia de la banda, son muchos de los que fueron sus componentes los que nos han dejado, sirvan estas pocas palabras de recuerdo para mi hermano Juan y para los que como él se marcharon y que con su dedicación hicieron posible ese proyecto colectivo que hoy continua adelante, La Popular Sansense.

viernes, 1 de junio de 2012

5. El maestro Vallespí


Descanso en la plaza. Años 60
José María Vallespí, nació en Beceite (Beseit), Teruel, en 1893 y de muy joven se trasladó a vivir con su familia a Sants un popular barrio obrero de Barcelona. Siempre quiso estudiar música, la música siempre fue su pasión; como tantos otros jóvenes, Vallespí trabajaba en una fábrica y tuvo que compaginar su trabajo diario con los estudios de música.
Siendo aún muy joven pudo realizar uno de sus sueños y fundó La Popular Sansense a la cual dio el nombre de su querido barrio. Con Vallespí en todos los sentidos al frente, la banda tuvo éxito y nunca les falto trabajo, después llegaron los toros.
En los años cincuenta Vallespí trasladó su residencia al vecino barrio de Santa Eulalia en la ciudad de L'Hospitalet, donde por aquel entonces trabajaba.
A final de la década de los sesenta el maestro Vallespí se jubiló dejando a su yerno Enrique Pallarés a cargo de la banda. En 1972, cuando José María Vallespí contaba 79 años, y tras unos años de enfermedad, falleció dejándonos a todos la herencia de La Popular Sansense a la que tanto amó y a la que tanto tiempo y trabajo le dedicó.

4. Apunte histórico


                                    Tres profesores de la Sansense. Años 50 

La Popular Sansense toma su nombre del barcelonés barrio de Sants (Sans) que la vio nacer y al que siempre estuvo muy ligada. No obstante, y a pesar de su nombre, en la actualidad la banda tiene su sede en el barrio barcelonés de Trinitat Vella, justo en el otro extremo de la ciudad.

La banda fue fundada en el primer cuarto del siglo XX por el maestro José María Vallespí, quien durante más de cincuenta años fue su director, gestor e impulsor. A finales de los años sesenta, el maestro Vallespí se jubiló y paso la batuta a su yerno Enrique Pallarés, a quien después han sucedido en el cargo Diego Martín y Antonio Martín.