Triste jornada la que se vivió en La Monumental de
Barcelona el domingo 1 de septiembre de 1985 en la que los músicos de La Popular
Sansense hubieron de estrenar de manera póstuma el pasodoble Casta Torera, de la gran compositora y
amiga Elvira Checa Agüero, dedicado al
diestro José Cubero Sánchez El
Yiyo que había muerto trágicamente toreando en la plaza de Colmenar Viejo dos días
antes.
Estos días se cumplen 31 años de la infausta muerte en la arena del joven torero El Yiyo que conmocionó la opinión publica del país.
El 30 de agosto la joven promesa del toreo José Cubero, con solo 21 años, caía de manera fulminante sobre la arena del coso madrileño como consecuencia de una mortal cornada directa al corazón asestada por el toro Burlero, el sexto de la tarde.
Además, se dio la especial circunstancia de que El Yiyo no tenía que torear ese día, lo hizo substituyendo en última hora a Curro Romero que no pudo acudir por enfermedad.
El 30 de agosto la joven promesa del toreo José Cubero, con solo 21 años, caía de manera fulminante sobre la arena del coso madrileño como consecuencia de una mortal cornada directa al corazón asestada por el toro Burlero, el sexto de la tarde.
Además, se dio la especial circunstancia de que El Yiyo no tenía que torear ese día, lo hizo substituyendo en última hora a Curro Romero que no pudo acudir por enfermedad.
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José Cubero El Yiyo. Origen Wikipedia |
La partitura había de ser estrenada igualmente por
La Popular Sansense dos semanas más tarde, el sábado 14 de septiembre en la Casa
de Madrid de la Ciudad Condal coincidiendo con la corrida de toros en la que había
de torear El Yiyo en La Monumental al día siguiente y en la que se tocaría por
primera vez Casta Torera en la plaza ante su protagonista, pero la fatal
desventura precipitó los acontecimientos.
Aquella apesarada tarde, presidida por el recuerdo
de El Yiyo, en la cual los diestros Julio Robles, Curro Durán i Lucio Sandín
torearon seis astados de la ganadería Molero Hermanos, nada más empezar el ritual
paseíllo y después de un minuto de silencio en memoria de José Cubero, la banda,
dirigida por el maestro Antonio Martín, interpretó en el ruedo barcelonés por
primera vez en público el pasodoble dedicado al malogrado torero.
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Cartel del Museo Taurino de Barcelona, La Monumental |
Sólo once meses antes, en la arena de Pozoblanco, El
Yiyo había sido testimonio de excepción de la mortal cornada que acabó en circunstancias muy similares con la vida de Francisco Rivera “Paquirri”
con quien, junto con El Soro, compartía cartel aquella fatídica tarde del 26 de septiembre de 1984, y
fue él precisamente quien hubo de encargarse de rematar al toro Avispado que acababa de herir de muerte a Paquirri.